Quienes somos y que hacemos...

Círculo de Escritoras Dominicanas Aída Cartagena Portalatín, bajo la dirección de la Lic. Anny Ramírez , ha sido creado con la finalidad de captar el talento de escritoras dominicanas escondido tras bambalinas a fin de ayudarlas en la difusion de sus obras y escritos.

El Círculo de Escritoras Dominicanas Aída Cartagena Portalatín, tiene como miembros fundadoras y fervientes colaboradoras a dos grandes mujeres y talentosas dominicanas: Las escritoras Hilda Arzeno y Jael Uribe. La idea surge como una iniciativa novedosa, para dinamizar la creación literaria a nivel femenino en la República Dominicana, para que todas aquellas mujeres que tienen el sueño, el anhelo, la meta de publicar sus escritos, puedan encontrar quien las asesore y sirva de guía para lograr ese propósito. Deseamos acercar a las escritoras con la comunidad para que estas puedan realizar su aporte sociocultural, poniendo de manifiesto su talento al servicio del pueblo dominicano.

Nuestra visión es contribuir al avance y especialización de las escritoras dominicanas, sirviendo como herramienta impulsadora de los proyectos que vayan surgiendo. También pretendemos preservar la unidad entre las integrantes porque somos de la creencia de que en la unidad es que se encuentra la clave del éxito.


¿Por qué un círculo?

El cículo representa la expansión natural del punto de inicio de la vida. Dicha figura nos manifiesta, desde una perspectiva general, el principio y el fin de la existencia. Por tanto, es nacimiento y muerte, al tiempo que ha sido interpretado muchas veces como la manifestación del infinito. Conviene destacar las grandes conexiones que tiene el círculo con la historia de la humanidad. Por una parte, nos remite a la hoguera, al fuego de lo sagrado y a la antigua concepción humana de que la protección estaba en torno al fuego. Es precisamente alrededor de este elemento que nuestros antepasados se reunían en sentido circular para obtener el calor y la seguridad. De estas formas vemos que el círculo une creando hermandad, vínculos y familia. Nosotras, somos una familia! y como tal, aspiramos a conocer mujeres de sueños grandes, dispuestas a entregarse a esta linda labor con vocación y amor.

Las puertas del Círculo de Escritoras Dominicanas Aída Cartagena Portalatín, estarán abiertas para acoger a cuantas damas se sientan motivadas a dar riendas sueltas a su creatividad, de forma colectiva e individual en los géneros de: Cuento, novela, poesía o drama, pudiendo así, alcázar un amplio desarrollo literario.

Para integrarse al Círculo de Escritoras Dominicanas Aída Cartagena Portalatín sólo deben escribir a la siguiente dirección de correo electrónico: escritora_dominicana@hotmail.com o a circulodeescritorasdominicanas@gmail.com, envíanos alguno de tus escritos que consideres te defina como autora y la razón que te motiva a escribir y ademas de porque deseas participar en el círculo y te entrevistaremos.

Tú puedes ser nuestro vocero, si no puedes colaborar en lo económico, puedes correr la voz!


Si tienes una página de internet o blog y deseas colocar un banner de nuestro grupo, escríbenos y te haremos llegar los modelos disponibles.




Bienvenidos a nuestro espacio! Este es un proyecto realizado con amor, digno de ser apoyado y patrocinado, Conviértase en nuestro vocero, participe!
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Escritos y Poemas

Nuestras escritoras comparten su talento.

Soy...Poesía

Anny Ramírez

Antes de ser lo que soy ya existía,
en el rocío que se cuaja
en los suaves pétalos
de las rosas dormidas.

Entre el ininterrumpible bullicio
de la multitud en jerga.
En los siete colores del arco iris,
volaba junto a las nubes que flotando pasean.

Antes de ser lo que soy ya existía.
en el invierno frío, en el otoño gris,
en el verano ardiente,
en la primavera florecida.

Antes de ser lo que soy, ya existía,
en los romances acariciadores
que se ocultan en la manta negra
de la noche fría.

Mezclada en la fonética,
en la entonación perfecta
de una melodía.
¡Ya existía! ¡Ya existía! ¡Ya existía!

En la sal, en la miel,
en la copa vacía,
en la felicidad, en la desdicha,
en la maternidad de una mujer en cinta,
En el pañuelo humedecido de melancolía.

Habito en el nardo,
la azucena, el jazmín,
la violeta, el clavel,
la rosa, el tulipán
y la margarita,

En todas las flores que coronan
la naturaleza llenándola de delicia.
Voy surcando como mariposa escurridiza.
Para vestirme con la ingenuidad de un niño,
con la ternura y la simpatía.

Yo, ya existía, me hice adicta del amor,
y la pasión ha sido mi bebida preferida.
La fantasía me ha dibujado alas para partir a la lejanía,
donde festejan las estrellas
junto la luna en una atmósfera distinta.

¡Ya existía!
¡Ya existía!
¡Ya existía!
En la fuente del saber.
En la conciencia bendita.
En la blancura de la paz.
En la esperanza, en la armonía.

Estoy aquí. ¡Existo!
Se me puede ver
soy palpable
para aquellos que viven y mueren
por hacer nacer, por hacer crecer
al amor y al romance.

Antes de ser lo que soy
¡Ya existía!
Permítanme presentarme,
Soy...Poesía.




La poesía es el lenguaje del alma, un desahogo de los sentidos, un orgásmico encuentro con los sentimientos más íntimos. Un amante que se expresa a través de la tinta, y que explota en una hoja de papel blanco, dejando en él sus indelebles manchas.

La poesía es amor, es sinfonía de palabras, una pasión que se lleva muy dentro de las entrañas.

La poesía es cadencia, que se baila al son de notas tristes y melancólicas. Unas veces fiesta, otras veces luto, unas tantas silencio y otras tantas, voz.

Cantamos con las manos, y hacemos de nuestras letras expresión y emoción, inspirados por el odio, el olvido, la desdicha, la desilusión, pero también nos convertimos de musas, inspirados por el amor, la verdad, la justicia y la paz.

Los poetas somos esclavos de nuestra sensibilidad y dueños de nuestras verdades. Estamos malditos y bendecidos a la vez, porque nuestros sentimientos cuelgan por nuestros pellejos a flor de piel y muchas veces olvidamos que todos nos pueden ver.

Somos previsibles, pero impredecibles, y eso nos hace impenetrables. Nuestros secretos están claros, pero a la misma vez son insondables. Si no tuviéramos el don de letras, quizás nuestro dolor sería insoportable.

Mas de mi en http://poemasdelalma2.blogspot.com gracias por sus comentarios y visitas.



Mi amante nocturna.

Por: Hilda Arzeno

Escribo por que hay partes de mí que han muerto. Porque hago los duelos colectivos. Porque hay heridas que persisten en el tiempo y sin remedio. Porque es la catarsis más instantánea que conozco. Porque de vez en mes me pierdo y las letras me enseñan el camino de regreso. Escribo cuando me duele el alma, cuando se exprimen mis dolores, cuando se revuelcan los recuerdos, cuando ya no siento.

Cuando el corazón agoniza y la conciencia me desquicia. Cuando mis manos tiemblan por el vicio de escribir. Cuando la locura amenaza con atraparme y la razón con escaparse. Vuelvo a escribir cuando me inquieto en señal de ansiedad, cuando se desorientan mis sentidos, cuando me quedo en vilo, cuando lloro, cuando estorbo, cuando no hay fuerzas, cuando la existencia ya no encuentra más penas.

Escribo porque es el desahogo más certero. Porque es el mejor psicólogo ante un loco. Porque no pago consultas, porque amo contradecirme, porque escribiendo es cuando me entiendo. Porque las letras me alimentan los vacíos existenciales.  Porque en las letras encontré asilo, porque en ellas nadie me juzga, son egoístamente mías.

Escribir es un remedio al suicidio, a la crueldad de la realidad, a los días incoloros, a la soledad, al olvido. A las carencias de afecto, a las mentiras que nos enduren como piedras y a la verdad que se ve todos los días.

Las letras son mi amante lesbiana, mi socorro instantáneo, mi acompañante nocturna. Mi día y mi noche, quien provoca mis orgasmos instantáneos, mis sonrisas más perversas y mis lágrimas más honestas.